Al comprar tu primer vehículo entran cientos de opiniones
de amigos y familiares que repiten lo que en su momento les dijeron a ellos y
lo toman como verdades absoluta.
Esa información no siempre es la más certera y aunque esté llena de buenas intenciones, no es de gran ayuda.
5 mentiras que seguro te han dicho sobre el cuidado de
las llantas de tu auto
· Las llantas nuevas se ponen adelante
Esto no lo es lo más recomendable ya que los neumáticos
nuevos es mejor ponerlos atrás para tener un mejor agarre al piso. Con esto se
reduce el riesgo de sobreviraje, además de que una pinchadura en un neumático
trasero es más riesgosa, lo que es más seguro que ocurra con una llanta
desgastada.
· Las llantas se reemplazan cada cuatro años
Medir por tiempo el reemplazo de las llantas es muy
ambiguo debido a que lo que determina el estado de las llantas es
principalmente el uso.
· La llanta de refacción debe tener una presión menor
Este comentario está sujeto a debate, lo importante es
que no exceda los niveles de presión que indica el propio neumático, pues el
exceso de calor puede provocar una destrucción repentina.
· La llanta de refacción es igual a una llanta nueva
Esta llanta en realidad solo sirve para salir del apuro
en caso de una ponchadura en carretera, pero no se puede usar como neumático
regular.
· Inflar las llantas al máximo mejora el rendimiento
Un neumático inflado en exceso es más propenso a las
ponchaduras y aunque también existe la creencia que durante el tiempo de calor
hay que reducir la presión del aire, es innecesario pues las variaciones del
clima están contempladas desde el diseño de los neumáticos.